El lino, el poliéster, el algodón y el yute son los materiales más utilizados en la fabricación de estores. Este tipo de cortina vertical goza de popularidad en el sector del interiorismo por su capacidad para regular la iluminación y embellecer el entorno mejor que las cortinas convencionales.

Antes de comprar un estor, es recomendable familiarizarse con las características y ventajas de sus distintos tipos, clasificados por materiales. En primer lugar, los estores de lino son los preferidos del gran público por su valor ornamental. Generalmente, poseen un acabado translúcido que potencian la iluminación a costa de la privacidad, si bien la opacidad del lino está determinada por el espesor de la tela, que puede engrosarse si se desea.

Los estores de algodón, por su parte, ofrecen una apariencia y tacto más delicados, capaz de responder mejor a las necesidades decorativas de salones, dormitorios, etcétera. De grosor variable, esta clase de estores ofrecen distintos niveles de privacidad, iluminación y ventilación, y está disponible en infinidad de diseños que facilitan su integración en cualquier entorno previamente decorado.

Dentro de los estores sintéticos, sobresalen los de poliéster y PVC, que destacan por la alta opacidad que pueden alcanzar, ayudando a preservar la intimidad en interiores. Posee una resistencia superior al lino y el algodón, siendo menos susceptible al deterioro causado por la exposición solar. Asimismo, su precio es más competitivo, por ser un tejido sintético.

Igualmente, se elaboran en poliéster los estores noche y día, pensados para modular de manera más eficaz la luz natural, sin desmerecer su impacto estético, capaz de dar un toque moderno y sofisticado a cualquier estancia. Gracias a su diseño enrollable, este producto puede recogerse completamente durante el día, en momentos en que interesa aprovechar las horas de sol para reducir el consumo eléctrico.

Como alternativa a los anteriores, el estor de yute natural son una rara avis dentro de este mercado. Su acabado natural, sencillo y con ese toque artesano de las fibras vegetales ayuda a ornamentar cualquier ambiente, sin renunciar a un accesorio que regula eficazmente la iluminación.