Desde hace bastante años estoy a favor de colocar mosquiteras en las ventanas de casa, sobre todo en primavera y verano, me da igual que sean mosquiteras enrollables o mosquiteras lisas, lo más importante es que los mosquitos se mantengan a raya con nuestra casa. Porque a nadie le gusta escuchar a los mosquitos mientras están durmiendo y que le despierten, o a mí personalmente no me gusta en absoluto, y es más, por norma general cuando oigo uno de esos molestos mosquitos me suelo despertar como si fuese la hora de despertarse y hasta que consigo matar al mosquito que me despertó. Una vez que he conseguido matar al dichoso mosquito ya puedo volver a dormir como si no hubiese pasado nada de nada.

En los pueblos, como hay más naturaleza y más animales, es más normal que haya más mosquitos y moscas que cuando se te meten en casa se convierten en una molestia, hay otros productos que se usan para poder controlar a los mosquitos y a las moscas, pero los únicos verdaderamente útiles son las mosquiteras, ya que son los únicos que impiden que que tanto las moscas como los mosquitos entren en tu casa y te fastidien constantemente. Y la invasión de moscas parece que no molesta hasta que te das cuenta de que han invadido tu casa. Eso le pasa a uno de mis amigos que vive en un pueblecito pequeño, quiere tener las ventanas abiertas, pero como se te ocurra abrir una ventana estás perdido. Seguramente el mes que viene vaya a hacerle una visita, ya que no es que su pueblo sea cerca de donde yo vivo, a ver si me acuerdo y le llevó unas mosquiteras para que pueda colocarlas en su casa y deje de llamarnos de todo por abrir una ventana. Pero lo que es de verdad extraño en su pueblo es que parece que haya más moscas en las casas que en la calle. Al aire libre no te sueles encontrar con casi ninguna mosca, todas prefieren pasar el rato en las pocas casas que hay en el pueblo.