Mi cuñado había puesto en alquiler su antigua casa y le había salido muy bien. Tenía un piso con su mujer en el centro que se había quedado pequeño y habían comprado otro. Pero en vez de venderlo lo pusieron de alquiler y lo incluyeron en una de esas plataformas digitales que tanto éxito tienen. Y en un principio les rentabilizó mucho más que si la hubieran vendido, al menos si las cosas seguían marchando bien a nivel turístico. 

Viendo el éxito del proyecto del cuñado, nosotros decidimos hacer algo similar. Lo que nos comentaron es que ellos habían reformado bastante la casa. La nuestra probablemente necesitaba menos reforma, pero, aún así, íbamos a tener que hacer una buena inversión. Pero como la hipoteca ya estaba pagada, nos daba tranquilidad. Y si finalmente no funcionaba el plan, siempre podíamos ponerla a la venta. 

Contratamos a la misma empresa que mi cuñado. Era una firma especializada en transformar casas en viviendas de alquiler. Al final, la mayoría de clientes de este tipo de casas buscan algo muy similar. Por ejemplo, el baño principal necesitaba un buen lavado de cara, así que cambiamos la bañera y pusimos una ducha, mucha más práctica para los viajeros, además de mamparas de ducha opacas, que en este tipo de viviendas son más útiles ya que aportan más intimidad.

El otro espacio que necesitaba intervención era la cocina que ya pensábamos nosotros reformar en su día cuando aún no habíamos comprado otro piso. Ahora ya tocaba. En esta clase de casas de alquiler, tal y como sucede en el baño con las mamparas de ducha opacas, se busca un estilo muy concreto, sencillo, práctico y moderno. 

Seguramente nosotros hubiéramos hecho algo diferente si hubiera sido para nosotros, pero confiamos en la empresa que ya había tenido éxito con muchas otras reformas de casas para ser transformadas en viviendas de alquiler por días. Finalmente, la reforma terminó y llegó el momento de comprobar si el nuestro plan podía tener viabilidad, y en las primeras semanas no tuvimos apenas ni un día la casa libre. Pintaba bien.